por Rick Boxx
Al hablar en nuestra Cumbre, una conferencia patrocinada por Unconventional Business Network, Terry Looper, autor de Sacred Pace, nos hizo una observación interesante. Él cree que todos deberíamos de esforzarnos por trabajar en nuestras áreas de máxima habilidad el 80 por ciento del tiempo. Podríamos llamar a esto «mantenernos en el carril», utilizando la metáfora del tráfico de no cambiar de carril con frecuencia mientras se conduce.
Cuando somos capaces de trabajar en formas que aprovechan al máximo nuestras fortalezas, dijo Looper, encontramos una mayor alegría y somos más productivos. Hizo un comentario adicional sobre la capitalización de nuestro talento que me hizo mucho sentido. Cuando nos desviamos hacia áreas en las que no estamos dotados, no nos mantenemos en nuestro carril, privamos a los miembros de nuestro equipo de oportunidades para utilizar sus propios talentos y experiencia. Cuando elegimos hacer ese trabajo, privamos de su alegría a los colegas que son mejores que nosotros en hacerlo.
¿Qué tan importante es eso de experimentar gozo mientras hacemos nuestro trabajo? Bueno, como alguien lo expresó: «Cuando amas lo que haces, no irás a trabajar ni un día más en tu vida». Si bien nuestro trabajo tiene sus elementos inevitables de monotonía, tedio y dificultad, no tiene por qué ser desagradable.
La Biblia lo explica bien en el libro de Eclesiastés: «Entonces llegué a la conclusión de que no hay nada mejor que disfrutar de la comida y la bebida, y encontrar satisfacción en el trabajo. Luego me di cuenta de que esos placeres provienen de la mano de Dios» [Eclesiastés 2:24 NTV]. En otras palabras, dado que pasamos gran parte de nuestros días y semanas trabajando, también podemos esperar encontrar satisfacción y alegría en lo que hacemos.
Uno de los temas recurrentes en la Palabra de Dios es el trabajo, especialmente desde la perspectiva del Señor, por lo que debemos prestar atención a lo que podemos aprender de las Escrituras sobre el trabajo y nuestra capacidad para disfrutarlo. Aquí hay algunos puntos:
- El trabajo puede traer las recompensas deseadas. Una de las ironías de la vida son las personas que vemos que quisieran experimentar muchas de las cosas buenas que la vida tiene para ofrecer, pero por alguna razón piensan que tales recompensas llegan sin esfuerzo ni determinación. Como dice el dicho: «Nada arriesgado, nada ganado». La Biblia lo dice así: «Las manos ociosas conducen a la pobreza; las manos hábiles atraen riquezas» [Proverbios 10:4 NVI].
- El trabajo puede traernos reconocimiento. En un mundo en el que tantas personas están satisfechas con dedicar el mínimo tiempo y esfuerzo, se notará a las personas que hacen lo mejor que pueden y van más allá de lo esperado. «¿Has visto a alguien diligente en su trabajo? Se codeará con reyes, y nunca será un don nadie» [Proverbios 22:29 NVI].
- Hay alegría y gratificación en trabajar en equipo con otros. Los logros individuales pueden ser gratificantes, pero hay algo especial en trabajar en equipo con personas talentosas y dotadas para lograr metas y objetivos comunes. «Es mejor ser dos que uno, porque ambos pueden ayudarse mutuamente a lograr el éxito. Si uno cae, el otro puede darle la mano y ayudarle; pero el que cae y está solo, ese sí que está en problemas. Del mismo modo, si dos personas se recuestan juntas, pueden brindarse calor mutuamente; pero ¿cómo hace uno solo para entrar en calor? Alguien que está solo puede ser atacado y vencido, pero si son dos, se ponen de espalda con espalda y vencen; mejor todavía si son tres, porque una cuerda triple no se corta fácilmente» [Eclesiastés 4:9-12 NTV].
No entrarías en tu trabajo, sacarías un arma y los asaltarías, ¿verdad? Pero de cierta manera, eso es lo que hacemos cuando nos aventuramos a hacer cosas para las que no estamos capacitados y usurpamos las tareas de los demás. Así que, mantente en tu carril: es posible que descubras que el todo es mayor que la suma de las partes.
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PREGUNTAS PARA REFLEXIÓN / DISCUSIÓN
- ¿Cómo sientes si estás conduciendo y alguien adelante se niega a permanecer en su propio carril, zigzagueando de un lado a otro tratando de adelantarse poco a poco? ¿Te resulta molesto que sean tan egoístas y desconsiderados, sin mencionar lo peligrosos que pueden llegar a ser?
- ¿Cuál es tu reacción ante la idea de «permanecer en su carril» en el lugar de trabajo, reconociendo las fortalezas y talentos de sus colegas y compañeros y permitiéndoles maximizar sus contribuciones a la organización?
- ¿Puedes pensar en ejemplos de ocasiones en que las personas que conocía, tal vez incluso tú mismo, no prestaron atención a este consejo e interfirieron con la capacidad de otros para realizar su trabajo lo mejor que pudieron? ¿Como fue eso?
- Por otro lado, ¿ha habido momentos en los que hayas observado o participado personalmente en grupos donde las personas obviamente trabajaban en armonía y experimentaban gran alegría y satisfacción en el proceso?
NOTA: Si tienes una Biblia y te gustaría leer más, considera los siguientes pasajes:
Salmo 139:14; Proverbios 13:4, 16:26, 18:9; Eclesiastés 5:18; Lucas 10:1-2
Las versiones bíblicas usadas en El Maná del Lunes están indicadas por sus siglas:
- Reina Valera Revisión 1960 (RVR)
- Nueva Traducción Viviente (NTV)
- Nueva Versión Internacional (NVI)
- Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Maná del Lunes ® es una reflexión semanal de CBMC (Comité de Profesionales y Empresarios Cristianos), organización internacional, sin fines de lucro ni vínculos religiosos, fundada en 1930 con el propósito de compartir el Evangelio de Jesucristo con la comunidad profesional y empresarial.
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