Por Robert D. Foster
Cada vez que pienso en el trabajo, recuerdo una cita del escultor británico Henry Moore: «¿Cuál es el secreto de la vida? Es tener una tarea, algo a lo que puedes dedicar toda tu vida, algo a lo que aportas todo, cada minuto del día por el resto de tu vida. Y lo más importante es que debe ser algo que no tengas posibilidades de alcanzar».
El trabajo se asocia con todo tipo de males: esclavitud, talleres clandestinos, huelgas, trabajo de mala calidad, abuso infantil, costos inflados, salarios bajos y ganancias elevadas. Dios dio el regalo del trabajo y el hombre lo arruinó.
- Algunos de nosotros hemos experimentado el dolor del trabajo insatisfactorio y sin sentido.
- Algunos de nosotros hemos hecho un buen trabajo que no fue reconocido ni apreciado.
- Algunos de nosotros trabajamos hasta el punto de agotamiento.
- Algunos de nosotros vemos cómo la pobreza implacable se traga nuestros escasos bienes.
- Algunos de nosotros hemos sufrido acoso en el trabajo.
- Algunos de nosotros sufrimos la monotonía del trabajo o el dolor del desempleo.
Para muchos, el sueño de la persona de negocios exitosa es que logre acumular ropa bonita, autos, casas, viajes y tenga una amplia cartera financiera. Al final de la semana de trabajo, estamos tentados a gritar: «¡Gracias a Dios que es viernes!». Para algunos, esos cinco días laborales fueron solo una forma de acumular dinero para unas vacaciones exóticas o nuestras actividades de ocio favoritas.
Pero el trabajo no tiene por qué ser una búsqueda inútil o sin sentido. Tomemos como ejemplo al pintor Vincent van Gogh (1853-1890). Aunque pasó menos de 10 años en su vocación como artista, produjo cerca de 900 acuarelas y 1,000 bocetos antes de morir a los 37 años. Hacia el final de su vida, mientras vivía en París, van Gogh produjo 228 pinturas. Uno de ellos fue «El retrato del doctor Gachet», se vendió por 82.5 millones de dólares en una subasta en la ciudad de Nueva York 100 años después de su muerte. ¡La puja duró menos de tres minutos!
Muchos de los temas de van Gogh eran relacionados a trabajadores: granjeros, pescadores, tejedores, amas de casa, empleados de fábricas y mujeres que reparaban redes. En 1885 escribió a su hermano Theo, explicándole su filosofía de trabajo: «Hay que trabajar y atreverse, si de verdad se quiere vivir».
Las Escrituras comparten la misma perspectiva. El primer capítulo de la Biblia declara que el trabajo fue idea de Dios: «Y creó Dios al hombre a su imagen… hombre y mujer los creó. Dios los bendijo y les dijo: “Sean fructíferos y multiplíquense; llenen la tierra y sométanla; dominen a los peces del mar y a las aves del cielo, y a todos los reptiles que se arrastran por el suelo» [ver Génesis 1:27-28].
En el segundo capítulo dice: «El Señor Dios puso al hombre en el jardín de Edén para que se ocupara de él y lo custodiara» [Génesis 2:15 NTV]. En esencia, Dios estaba delegando a la humanidad para que sirviera como mayordomos y cuidadores de Su creación.
El Nuevo Testamento de la Biblia también presenta el trabajo desde una perspectiva muy positiva. Una traducción lo expresa así: «Todo lo que hagan, háganlo de buena gana, como si estuvieran sirviendo al Señor Jesucristo y no a la gente. Porque ya saben que Dios les dará, en recompensa, parte de la herencia que ha prometido a su pueblo. Recuerden que sirven a Cristo, que es su verdadero dueño» [Colosenses 3:23-24 TLA]. El trabajo debe ser considerado como un privilegio, no como una maldición.
Copyright 2023, publicado originalmente en “Take Three On Monday Morning”, esto fue adaptado de un mensaje de Robert D. Foster, quien murió en 2016 a la edad de 96 años. Durante su vida, Bob formó parte del personal de The Navigators, fundada, y operaba Lost Valley Ranch en Colorado Springs, Colo., era miembro de la Junta Nacional de CBMC y continuó viajando como embajador de Cristo a diferentes partes del mundo hasta bien entrados los 90 años.
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PREGUNTAS PARA REFLEXIÓN / DISCUSIÓN
- ¿Qué crees que quiso decir el escultor Henry Moore cuando dijo que el secreto de la vida es una tarea a la que puedes dedicar toda tu vida y «algo que posiblemente no puedas hacer»? ¿Está diciendo que debemos esforzarnos por cosas que consideramos más allá de nuestro alcance, y si es así, qué beneficio tiene eso para nosotros?
- ¿Puedes identificarte con algunas de las «clases de maldad» que puede representar el trabajo? ¿Si es así, cuales y por qué?
- ¿Cómo respondes a la afirmación del renombrado artista Vincent van Gogh: «Uno debe trabajar y atreverse si realmente quiere vivir»? Teniendo en cuenta que van Gogh murió a la edad de 37 años, ¿crees que logró su objetivo? Explica tu respuesta.
- ¿De qué manera debería marcar la diferencia si consideramos nuestras responsabilidades laborales y trabajamos como para el Señor, como lo dice la Biblia, y no solo para nuestros jefes humanos?
NOTA: Si tienes una Biblia y te gustaría leer más, considera los siguientes pasajes:
Proverbios 12:11, 14:23, 22:29; Eclesiastés 12:13-14; Efesios 6:5-9; Colosenses 3:17,22
Las versiones bíblicas usadas en El Maná del Lunes están indicadas por sus siglas:
- Reina Valera Revisión 1960 (RVR)
- Nueva Traducción Viviente (NTV)
- Nueva Versión Internacional (NVI)
- Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Maná del Lunes ® es una reflexión semanal de CBMC (Comité de Profesionales y Empresarios Cristianos), organización internacional, sin fines de lucro ni vínculos religiosos, fundada en 1930 con el propósito de compartir el Evangelio de Jesucristo con la comunidad profesional y empresarial.
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